Culiacán, Sinaloa; a 17 de junio de 2025.-
Ante el registro de abusos y maltratos de adultos mayores, además de que en el mediano plazo se incrementará notablemente esta población, diputada del PAS y diputado de Morena se pronunciaron a favor de tomar conciencia de esta situación, así como por reformar leyes que permitan una mejor atención y cuidado para este sector poblacional.
En el punto de Asuntos Generales de la Sesión Ordinaria del Congreso del Estado de Sinaloa, que tuvo lugar este martes, subió a tribuna la diputada Jesús Angélica Díaz Quiñónez, del PAS, quien precisó que de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud para 2030 se habrá incrementado un 38 por ciento la cantidad actual de adultos mayores de 60 años, por lo que se pronunció por erradicar todo maltrato que sufre este sector.
Explicó que su posicionamiento se debe a que el 15 de junio fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas como el Día Mundial de la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez.
Expuso que actualmente los adultos mayores sufren, por su edad, de prejuicios y discriminación, lo que les afecta en su salud, bienestar y sus derechos humanos.
En México, dijo, la Secretaría de Salud considera que entre el 8.1 y el 18.6 por ciento de las personas mayores de 60 años sufren algún tipo de maltrato, cifra que se eleva a 32 por ciento entre quienes tienen dependencia funcional y que afecta más a las mujeres a medida que envejecen.
En Sinaloa, añadió, se reciben hasta tres denuncias diarias por maltrato hacia adultos mayores, según la Comisión Estatal de los Derechos Humanos.
Las personas adultas mayores, precisó, sufren de discriminación, exclusión social, acceso limitado a servicios de salud, falta de oportunidades laborales, pérdida de roles familiares y una imagen negativa del envejecimiento.
El diputado Guadalupe Santana Palma, de Morena, expuso que el Día Mundial de la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez se instituyó para crear conciencia en las familias y la sociedad sobre los problemas físicos, mentales y de salud que puede padecer una persona adulta mayor, en particular quien padece una discapacidad.
El maltrato, dijo, comprende actos de abuso físico, emocional, económico o negligencia intencional, que atentan contra la integridad y los derechos humanos.
“El abuso físico deja cicatrices evidentes, pero el maltrato sicológico como las amenazas, las humillaciones o el aislamiento, producen heridas profundas en la salud mental de la persona”, expresó.
Consideró también que en el ámbito legislativo es indispensable robustecer los marcos normativos locales para tipificar claramente todas las modalidades de maltrato y establecer sanciones proporcionales a la gravedad del daño inflingido.
En las comunidades, añadió, se deben fomentar la creación de espacios intergeneracionales, grupos de convivencia, y realizar actividades donde la experiencia y sabiduría de las personas mayores se valore y enriquezcan el tejido social.
Destacó que de parte del Gobierno Federal se otorga de manera directa una pensión a las personas adultas mayores con un monto que llega a los 6 mil 200 pesos bimestrales, y se tienen más de 13 millones de personas beneficiarias.
Más recientemente, agregó, se ha puesto en marcha el programa “Salud Casa por Casa” para atender a personas adultas mayores y personas con discapacidad para otorgarles atención médica gratuita, preventiva y de calidad.