Ciudad de Mexico; a 15 de abril de 2025.- El lunes 14 de abril del presente, el Departamento de Comercio de Estados Unidos, notificó a los productores de tomate de México, vía el despacho que los representa, su intención de retiro del acuerdo 2019 por el que se suspende la investigación de derechos antidumping sobre tomates frescos procedentes de México.
De conformidad con lo que establece este documento, el Departamento de Comercio, puede retirarse del acuerdo 2019 mediante notificación por escrito con 90 días de anticipación, por lo que será el 14 de julio del 2025 cuando se rescinda dicho acuerdo y se emita una orden de imposición de derechos antipumping por el 20.91 por ciento del valor de las exportaciones, lo que seguramente tendrá un fuerte impacto en las exportaciones del tomate que representan alrededor de 3 mil millones de dólares con un volumen de alrededor de 2 millones de toneladas.
Es importante dar el antecedente que desde 1996 la Federación de Productores de Hortalizas de Florida, interpuso una demanda de dumping a los tomates frescos provenientes de México, ante el Departamento de Comercio de Estados Unidos, porque consideraban que se estaba vendiendo a precios por debajo del costo de producción (precios justos). En esa ocasión los productores de México firmaron un acuerdo para suspender la investigación de dumping con el departamento de comercio de Estados Unidos por cinco años.
Desde esa fecha hasta el 2019, se estuvieron firmando quinquenalmente acuerdos de suspensión que permitieron a los horticultores de México exportar tomates frescos a Estados Unidos sin pagar un solo arancel, enmarcados en los tratados de libre comercio, primero el TLCAN y ahora el TMEC.
El último acuerdo de suspensión se firmó en el primer periodo de Donald Trump
el 31 de mayo del 2019, que coincidió en el mismo año de la renegociación del
TMEC. El pasado mes de junio del 2024, los productores de Florida solicitaron de nuevo terminar con el acuerdo que suspende la aplicación del arancel antidumping y después de un proceso de consultas el día de ayer, el Departamento de Comercio resolvió terminar con el último acuerdo con el plazo de 90 días mencionado para su aplicación, en ese plazo podría haber la
posibilidad de que el Gobierno de México negociara con el Gobierno de Estados Unidos un nuevo acuerdo.
Consideramos nosotros que la relación del sector agropecuario con Estados Unidos es una relación equilibrada y complementaria, ya que nosotros les exportamos frutas y hortalizas, dos de cada tres tomates que consumen en ese país provienen de México, pero nosotros importamos casi por un valor
equivalente granos, oleaginosas, carne de puerco, pollo y lácteos, por lo que en esta relación comercial salen beneficiados en primer lugar, los consumidores de ambos países pero también los productores de México y farmers de Estados Unidos.
Si el acuerdo se termina, a pesar de que es una relación benéfica para ambos
países, entraría en vigor un arancel antidumping del 20.91 por ciento, lo que
tendría un fuerte impacto en la exportación del tomate de México, que representa un valor nacional de 2 mil 700 millones de dólares y da una ocupación directa e indirecta de alrededor de 950 mil personas a nivel nacional, y particularmente en Sinaloa ya que el tomate representa más del 50
por ciento de las 800 mil toneladas que exportó nuestro estado en el 2024.
Afortunadamente, la temporada agrícola 2024 – 2025 del tomate en Sinaloa,
está actualmente en un nivel bajo y terminará en el mes de mayo, por lo que de aplicarse estos aranceles, en este ciclo no habría afectación para nuestro estado, sin embargo para otros estados, del occidente y bajío que producen con agricultura protegida y cielo abierto, podrían ser afectados.
Las organizaciones de productores de tomate de México, conjuntamente con
el Gobierno Federal, a través de la SADER y la Secretaría de Economía ya estamos atendiendo este asunto, con el propósito de establecer negociaciones con el Departamento de Comercio de Estados Unidos donde seguramente se modificarían los precio de referencia y requisitos de monitoreo y seguimiento a las exportaciones y así poder llegar a un nuevo acuerdo de
suspensión de dumping del tomate.
En el supuesto de firmar un nuevo acuerdo como lo hemos hecho desde hace 30 años, tendríamos hasta el 2030 o antes, si dentro de ese periodo alguna de las partes solicita consultas para revisar el acuerdo.