Culiacán, Sinaloa; a 16 de enero de 2024.- Como consecuencia de los problemas de comercialización de cosechas que se tuvieron en el ciclo primavera verano 2023, los daños recientes por heladas y la falta de agua para riego que enfrentarán los productores agrícolas para el ciclo otoño invierno que está en marcha, en 2024 se espera un decremento del 10% en el Producto Interno Bruto (PIB) del Estado de Sinaloa, pronosticó Cristina Ibarra Armenta.
La especialista en economía de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Autónoma de Sinaloa recordó que en 2023 Sinaloa creció 2 puntos menos que la media nacional y que esa tendencia se viene observando desde 2022 por una caída en el sector agrícola.
“Podría suceder que a quienes logren cosechas les vaya bien pero que la población en general suframos porque haya una carestía mayor de alimentos, la realidad es que en Sinaloa sí esperamos que la situación económica no vaya del todo bien y esperaríamos que haya una carestía en alimentos al menos en lo que va de 2024”, subrayó.
Entre los productos que se podrían encarecer en caso de un decremento de producción en el campo, Ibarra Armenta citó principalmente el frijol, maíz y trigo porque Sinaloa, al igual que otros estados que son productores, están teniendo problemas por la falta de agua.
“El tema del maíz, el tema del frijol, como ya sabemos Sinaloa es un alto productor de maíz, ya sabemos que otros estados que también son productores de maíz también están teniendo problemas de agua, en el tema del frijol, el frijol también está alcanzando precios más altos porque no hay la producción suficiente y por lo tanto esperaríamos que haya una situación en la cual suban de precio los granos básicos”, indicó.
Ibarra Armenta subrayó que en esta tendencia de bajo crecimiento que se viene observando desde 2022 en Sinaloa, el campo es uno de los sectores más afectados y la repercusión se está viendo también en otros sectores relacionados, como son los servicios y el turismo.
“Venimos viendo un estado con bajo crecimiento, con un crecimiento más lento en su sector primario, en este 2023 con todos los problemas de comercialización y en 2024 con problemas de la sequía yo creo que el campo va a ser muy afectado y obviamente los sectores que están relacionados”.
Al igual que el especialista en Suelos y Aguas de la Facultad de Agronomía, Azareel Angulo Castro, la especialista en Economía Cristina Ibarra Armenta no descartó la posibilidad de que en los próximos meses pudieran darse enfrentamientos por el agua entre los productores agrícolas.
“Definitivamente la gente que ya sembró va a pelear por el agua porque implica una fuerte inversión para ellos y muy probablemente invirtieron o con recursos propios o con recursos de una financiera con altos costos”, puntualizó.